31 jul 2008

La otra Betty, la guapa


Si hace unos días me quejaba del injusto trato de las distribuidoras a "Studio 60" hoy debo alabar la iniciativa de Cameo, que se atreve a editar un pack con la totalidad de "Some Mothers Do'ave'em" en dvd. Esta telecomedia puramente british fue emitida por la BBC nada menos que hace 35 años, pero sigue manteniéndose en forma gracias fundamentalmente al talento cómico de Michael Crawford. Para muestra un botón:


El personaje de Frank Spencer, con su boina calada y gabardina abotonada, figura en lo más alto de la comedia británica, junto al huraño Basil Fawlty (John Cleese, "Falwty Towers") o el cínico Sir Humphrey (Nigel Howthorne, "Yes, Minister"). Sin llegar al dominio corporal de un Michel Courtemanche, Crawford ya era el manazas oficial mucho antes de que Rowan Atkinson inventara su antipático Mr. Bean.

Para su fortuna, el inútil de Spence está casado con la encantadora Betty (Michele Dotrice), mujer adorable y dotada de infinita paciencia, en la que Frank despierta un generoso sentimiento maternal y protector. Sólo así se explica que una chica tan bonita e inteligente como ella fuera capaz de aguantar capítulo tras capítulo los desaguisados, catastrofes y calamidades que provoca su desastroso marido.

En sus comienzos TV3 emitió esta serie logrando un clamoroso éxito de audiencia y fijando en la memoria de toda una generación aquel clásico "Beeettyyy!!!!", que Crawford (antes de hacerse fantasma famoso cantando musicales) gritaba acongojado, y que Joan Pera supo doblar con exquisitez... al catalán.

Porque la serie no llegó nunca a emitirse en el resto del territorio español y, por esta razón, el pack en dvd no incluye pista de audio en español. Sí se ofrece la versión original con subtítulos en castellano, lo que -a pesar de ser un detalle de agradecer a la distribuidora- supone un problema, ya que mientras se lee pueden perderse muchos detalles de interpretación.

Afortunadamente, "N'hi ha que neixen estrellats" (su título en catalán) se articula fundamentalmente sobre humor visual.


N'HI HA QUE NEIXEN ESTRELLATS
edición de cameo
sobre la serie
la secuencia del patinador
michael crawford
(!)

29 jul 2008

Castillos y Castells


Mientras algunos sueñan castillos en el aire con la esperanza de que se reconozcan sus selecciones nacionales deportivas, otros siguen construyendo castillos en la tierra superando barreras de diferencia social, geográfica y racial.

El ser humano anhela el triunfo propio; una vez logrado puede limitarse a disfrutarlo, gestionarlo para obtener nuevas metas, alargarlo como un chicle (“vivir del éxito”) o lapidarlo ( “morir del mismo”). Tampoco nos cuesta mucho compartir las victorias de los demás –en especial las deportivas- aunque hayamos tenido que ver poco o nada con ellas. Pero hay momentos en los que uno siente orgullo por lo que hacen otras personas sin que medie una competición o un acto de sacrificio.

Gracias a un excepcional reportaje de “30 minuts” hemos descubierto un nuevo fenómeno de exportación. Y esta vez no se trata de un asunto de grandes corporaciones, ni de empresas avispadas, ni de modelos emergentes de negocio. Es más: lo mejor de todo es que no hay dinero de por medio.

Resulta que los Castellers de Vilafranca han atravesado el Gran Charco y se han ido a enseñar a los chilenos cómo se hace un castell. Pero no como reivindicación nacional –como pudo ser la pompa literaria de la Feria de Frankfurt- ni como exhibición folklórica. Con el apoyo entusiasta del gobierno de Chile los catalanes enseñan a los adolescentes que residen en zonas conflictivas cómo levantar un “quatre de nou amb folre” o “descarregar un cinc de vuit”. Pero más que eso les transmiten una manera de entender la vida y el éxito muy alejada de la competitividad perversa y el egoísmo manipulador disfrazado de auto-superación que les llega de otros lugares. Una filosofía que se fundamenta en el respaldo colectivo, la necesidad mutua para crecer o la alegría como premio. Semejantes valores positivos enriquecen su vida personal y se extienden como una epidemia balsámica e inspiradora a sus familias desestructuradas y barrios marginales.

En el esfuerzo se aúnan dos objetivos: el de generar oportunidades de ocio alternativo a una juventud atrapada en la desidia y la drogadicción, y realizar una labor pedagógica que proyecte a toda una generación a un futuro afianzado en la solidaridad, el trabajo en equipo y la amistad que identifican al món casteller. No me dirán que no es para ir vacilando por ahí de “nuestra” aportación a la utopía de un mundo mejor… aunque lo de las selecciones nacionales no prospere.

27 jul 2008

¡"Studio 60" en dvd!


No, no es una noticia. Es una súplica. Cada mes pasa lo mismo: uno echa un esperanzado vistazo a la lista de novedades de las distribuidoras y no aparece ni como futurible. Es lamentable que, con la de estupideces que se han llegado a comercializar, una serie magnífica como ésta no haya sido editada en España. La única posibilidad de visionar esta masterpiece de Aaron Sorkin es aguardar a que Cuatro o Digital+ vuelvan a reemitirla (si encuentran un hueco en el que no repitan por enésima vez algún capítulo de "Mad Men") o comprar la edición USA en NTSC.

Acaban de lanzarla en Region 2, pero en inglés y con subtítulos... ¡en húngaro!
Sí. Ya sé que muchos dirán que hay otra "alternativa"; pero uno no es de los que colecciona descargas, aunque sean legales. Prefiero pagar por mi pack; tocarlo, olerlo, leerlo y tenerlo en casita para ver los capítulos cuando quiera, en el idioma que me apetece, con o sin los subtítulos que eliga y, a poder ser (no siempre es posible), degustando los extras de rigor.

Si, como yo, disfrutaste con los personajes, situaciones y diálogos de Matt Albie, Danny Tripp, Jordan McDeere y compañía apúntate a la Plataforma pro edición en dvd de "Studio 60". A ver si conseguimos presionar a quien pueda hacer realidad nuestro sueño. ¡Podemos!


25 jul 2008

Visión alternativa del final de “Los Serrano”


Como otros muchos caí en la tentación de comentar el sorprendente y polémico final de “Los Serrano”. No creo haber sido muy original, a juzgar por los artículos que he ido leyendo en la blogosfera. A la mayoría nos ha parecido una conclusión inapropiada, en fondo y forma, impropia de una de las series más seguidas en el país durante ocho temporadas.

Desde luego sugerir que todo lo visto ha sido un sueño del protagonista no puede considerarse muy ingenioso. Recuerdo la chufla entre compañeros cada vez que alguien sugería este recurso en algunos proyectos en los que he trabajado; de lo que deduzco –quizás equivocadamente- que no ha sido una solución propuesta por los guionistas. Pero aun siendo un arbitrio de lo más trillado se hubiera agradecido cierta osadía en el planteamiento.

Bruce Joel Rubin apostó por una variación audaz en “La escalera de Jacob”, donde Tim Robbins empieza a verse asaltado por pesadillas y sucesos extraños que lo abocan a una explícita bajada a los infiernos. Descubre al final que los últimos 20 años de su vida son una ficción nacida en su cabeza por efecto de unas armas químicas en Vietnam y que aún está allí, en la selva de los “charlies”, herido de muerte. Su vida posterior a este momento, su familia, sus amigos, su trabajo… han sido una alucinación proyectada al futuro mientras está agonizando tras haber aniquilado a su propio batallón. Ya lo dice jugando al despiste su frase promocional: “lo más escalofriante de las pesadillas de Jacob Singer es que no está durmiendo...”.

Confieso cierta debilidad por la paranoia crítica, así que me propongo presentar la hipótesis de que el auténtico final (doble en realidad) de los “Los Serrano” no es que todo ha sido un sueño del protagonista, sino que éste en verdad ha muerto y ha trascendido a una dimensión espiritual (cielo, purgatorio, limbo, más allá…) personalizada, donde sus seres queridos –o la proyección de su recuerdo- le acompañan. En otras palabras: que Diego Serrano muere y “su Cielo” es una vida eterna junto a los que ama (o ha amado).

Para argumentar esta hipótesis –y las razones por las que la audiencia no la habría detectado- lo apropiado sería revisar esos últimos minutos del capítulo:


Es obvio que no era el final previsto para “Los Serrano” cuando la serie se creó. De lo contrario se habría filmado la secuencia de la cocina en su momento, manteniendo el rigor y la verdad de los personajes.

Es posible –aunque no seguro- que el (doble) final sí estuviese pergeñado al iniciarse la grabación de de la final season, a juzgar por la promo que se grabó para anunciarla….


El entorno, la actitud del personaje, la puesta en escena parecen el momento previo (acaso el mismo día) al suicido de Diego Serrano, aunque sin anticiparlo en absoluto. El corte de la partitura es el mismo, desde luego.

Cuando se muestra el pasado de los personajes en el ámbito del género cómico se cuenta con la complicidad del espectador. Ahí están los increíbles postizos de los chicos de “Friends” en su etapa de instituto que nadie cuestiona. Al fin y al cabo se trata de hacer reír. Si el viaje atrás en el tiempo se produce en dramedia o telenovela, la dirección artística y la caracterización deben esforzarse mucho más para mantener la credibilidad de los personajes. “Los Serrano” lo tiene aún más crudo por su difícil catalogación genérica (algo frecuente en la ficción nacional).

Se ha escrito bastante sobre lo ridículo que resulta en la escena final ver a algunos personajes intentando disimular su edad y el efecto de las hormonas en sus cuerpos. Pero si consideramos que Diego Serrano ha muerto y ha pasado a otra dimensión (espiritual), lo lógico es que le apetezca estar en un lugar conocido y rodeado de sus seres queridos. Sus recuerdos se mezclan de tal modo que a algunos los ve tal como eran hace unos años y a otros tal como eran cuando abandonó el mundo de los vivos.

Ahora bien, si no se ha acabado de entender esta propuesta argumental es porque se han cometido otros errores de base (y no tanto de intrascendente caracterización):


La muerte invisible del protagonista

En primer lugar la secuencia climática del suicidio del protagonista se sustenta no en una estructura dramática sólida, sino en la planificación visual. El momento cumbre de la serie ha sido fagocitado por la realización para recrearse en él. Las posiciones de cámara no están al servicio de la historia o del personaje, sino de sí mismas. Movimientos continuos, grúa molona, montaje picadito… Un arsenal de recursos que contrasta con una aceleración forzada del acontecimiento dramático (la decisión del personaje es “precipitada”, y perdonen el chiste). Y también una interpretación que -esta vez- no está a la altura (perdón otra vez) del clímax argumental.

Lo grave no es dejar la historia y al protagonista en manos de la planificación, sino que –como era previsible a pesar del esfuerzo evidente- ésta se queda a medio camino, ya que nos hurta la mejor imagen de todas, la que hay que enseñar siempre: al protagonista cayendo desde lo alto del puente. Si vas a matar al protagonista, muéstralo muriendo. No puedes birlar esta imagen a la audiencia. Cualquier otra puede. Incluso la de la desdichada Lucía, que se quedó en muerte “en off”, o accidente en audio (qué lástima no haber visto a Belén Rueda como Brad Pitt en "¿Conoces a Joe Black?"). Pero ésta jamás. A los Coen se les puede permitir una elipsis de semejante alcance, y sólo si está legitimada por una planificación global de la película que la justifica.

Hazlo como quieras: poéticamente o con crudeza, usa slow motion, chroma, stunts, muñecos, truco digital o analógico… pero España tiene que ver a Diego Serrano cayendo.

El rodaje nocturno es complicado y la presión de la fecha de entrega criminal (aunque se trate del momento crucial de la serie). No hay presupuesto para un operativo como el que la historia demanda. Tampoco hay arrestos para hacerlo así, entre otras cosas porque Resines no se tiraría por mucho que le pagasen, un especialista cuesta una fortuna y sobre todo sería imposible mantener en secreto la grabación de una secuencia que debe sorprender a todos. Recuerden el revuelo con la filtración de la muerte de Lucía la temporada anterior. No podían correr riesgos otra vez.

La pregunta es que, sabiendo todo esto, ¿por qué decidieron que el suicidio fuese violento y tirándose desde un puente?


El Cielo o el Infierno

Diego Serrano ha muerto y “su Cielo” es seguir viviendo en el más allá con (la imagen recreada de) los suyos. Sería una versión dramedia de “Los Otros”. Resines es una especie de Nicole Kidman que prolonga su existencia más allá de la muerte, creyendo que sigue vivo e incluso sintiéndose esperanzado y feliz. Científicamente, su cerebro aloja suficientes recuerdos, imágenes, sonidos, conversaciones, olores, y percepciones de los sentidos que podrían recrear ese escenario indefinidamente. Si tuvo tanta imaginación para inventar tramas y subtramas entrelazadas durante ocho años en una cabezadita de tres horas, ¿por qué no puede guionizar su muerte en la otra vida? (¿O debería decir su vida en la otra muerte?)

Esta lectura plantea dos problemas. Uno ético y otro religioso. El mensaje que se envía es: no sólo hay vida después de la muerte, sino que ésta es maravillosa, plena, feliz. Esto conecta con la esperanza de eternidad de los creyentes. Pero el contexto católico en el que se ubica la familia Serrano –aunque sea una experiencia más floklórica que religiosa- determina que el Paraíso está vetado a los suicidas. En coherencia Diego no puede disfrutar de un Cielo maravilloso...

El problema ético está directamente relacionado con el religioso. ¿Es quitarse la vida una forma de solucionar los problemas? ¿De verdad la vida de Diego es tan terrible e insoportable que se ve incapaz de seguir luchando por su familia y sus amigos? ¿Es la muerte una vía de escape? ¿Tiene derecho este hombre (¡el referente!) a producir en los seres que dice amar la profunda tristeza de perderle y en circunstancias tan trágicas?... ¿Es éste el legado de "Los Serrano" a la sociedad de su tiempo?


Más allá de tales preguntas, surgen las realmente importantes en lo que a la serie se refiere: ¿Por qué el protagonista se rinde (cuando, estructuralmente hablando, en el conflicto radica el germen del drama)? ¿Es convirtiéndolo en un cobarde la forma en que se honra al personaje que ha sido la piedra angular de la serie?

Sea cual sea el final que pretendieron sus artífices (si el que se deduce globalmente o esta irrelevante alternativa) lo cierto es que supone una gran decepción.

23 jul 2008

Polémico final de “Los Serrano”


Hace como unos veinte años, las televisiones autonómicas programaron una serie de larga duración que en TV3 obtuvo un gran éxito y se tituló “A cor obert” (“A corazón abierto”). En el resto la conocieron como “Hospital General” -o algo así-. Narraba las vicisitudes del personal del Saint Eligius, hospital ficticiamente ubicado en la ciudad de Boston. Y digo ficticiamente con conocimiento de causa, pues aproveché un viaje a EE.UU. para visitarlo y me fue imposible localizarlo; aunque, como compensación, obtuve las oportunas instantáneas en el pub que inspiró la mítica “Cheer’s”…

Volviendo al asunto, la teleserie que originalmente se titulaba “St. Elsewhere” sirvió de trampolín para una camada de jóvenes intérpretes hoy consolidados, como Denzel Washington, David Morse o Mark Harmon. Además, el jazzman Dave Grusin compuso una de sus partituras más redondas para el tema de su cabecera.

El caso es que tras muchas temporadas en antena, los guionistas decidieron concluir la andadura de “St. Elsewhere” con un guiño a “Ciudadano Kane”. Al abrirse el plano sobre la imagen final del hospital nevado descubríamos que el edificio no era sino una miniatura alojada en una de esas bolas de cristal que, al sacudirlas, producen un efecto de nieve. El objeto está en manos de un niño autista, que lo sacude mecánicamente mientras su padre y su abuelo comentan que el chico no mejora de su enfermedad y se preguntan qué extrañas historias pasarán por su cabeza, de lo que se deduce que todas las tramas y subtramas de la serie sólo han existido en la mente autista del muchacho.


La semana pasada se emitió el último capítulo de otra exitosa serie; ésta de factura nacional: “Los Serrano”. Los artífices argumentales de la misma –quien sabe si considerando “A cor obert”, “El mago de Oz” o cualquier otro referente similar- decidieron “empaquetar” sus ocho exitosas temporadas en un sueño del protagonista (Antonio Resines).

Ya que estamos en capilla olímpica avengámonos a decir que toda serie que se precie necesita un deslumbrante castillo de fuegos artificiales a modo de clausura; a no ser que los creadores estén molestos con la cadena porque les cancela la emisión y decidan acabarla como les salga de las escaletas… (Conozco algunos casos de primera mano.) Un último capítulo suele ser el momento de echar todo la carne en el asador, de elevar la propuesta argumental a un clímax exultante, de despedirse a lo grande.

Hace unas semanas “La señora” ofrecía un ejemplo magnífico de cómo concluir una temporada como se suele decir “en tó lo alto”: tensión in crescendo, sorpresas, puntos de giro, revelaciones…

El último capítulo de “Los Serrano” optó por el caos planificado y, de paso, rindió otro homenaje cinéfilo, al menos en el título del capítulo ("Desmontando a Diego"). Una serie de infortunios acumulados que afectan a su entorno íntimo (familia, amigos…) llevan al protagonista, el tabernero Diego Serrano, a la desesperación y a quitarse la vida. Trágico –e inesperado final- para algo que siempre se ha vendido como propuesta “de humor”; castizo, edulcorado, melodramatizado, pero humor. Obviamente no podía ser esto más que una maniobra para sacudir a la audiencia (y de paso a los audímetros). Los guionistas jugaron (más que nunca) a ser dioses, haciendo despertar al protagonista en un ámbito confuso (¿el Cielo?), donde se reencuentra con su esposa fallecida meses atrás (¿paradoja?) y descubre que todo -incluso el fatídico destino de su esposa- ha sido una pesadilla… (¡trampa!).

Desde el punto de vista meramente técnico, dramático, formal es un final tramposo, indigno, chapucero y, obviamente por su trascendencia, polémico.

¿Cuál es la gran diferencia entre el final “encapsulado” de “St. Elsewhere” y el de “Los Serrano”?

En el de la primera los personajes que la cierran están fuera de la historia. Son actores de la serie, pero interpretando personajes distintos, lo que habilita la metaficción. En la propuesta de Globomedia se obliga a la audiencia a asimilar que el devenir de los personajes a los que se ha enganchado aún no ha ocurrido. No porque uno de ellos “lo ha soñado” (como parece en un primer momento) sino porque “lo ha anticipado” (como se descubre a continuación): el guiño final de su hermano, señalando que algún día se casará con cierta mujer, a lo que Resines contesta con un ajustado “Ya lo sé” así lo corrobora, haciendo cómplice al espectador de la nueva situación. Los guionistas no pretenden decir que todo ha sido un sueño sino una global premonición. En otras palabras: “os hemos engañado dos veces”. Nada de lo que ha pasado ha pasado (primer engaño), pero pasará (segundo engaño).

Lo que preocupa no es el órdago disfrazado de alarde de ingenio con el que se remata una serie emblemática, sino la sensación de que lo que se propone como pirueta dramática afecta a la unidad de la narración total o la macrohistoria.

Porque si el protagonista conoce de antemano todo lo que va a pasar es lógico pensar que intervendrá para modificar aquellos episodios que no desea (como la muerte de su esposa, por ejemplo). Cuando llegue ese momento ¿no poNdrá todo su empeño en evitar el accidente que le costó la vida a Lucía, reportando a Tele 5 los índices de audiencia más altos de la serie? Parece que los guionistas propongan lo siguiente al espectador: “usted no ha visto la auténtica historia de ‘Los Serrano’; la auténtica está por escribir” (eso mola… de estar prevista una nueva temporada). Y concluyen así: “…pero no la vamos a hacer” (lo que supone una bofetada a la audiencia, esa de la que han vivido cadena, productora y elenco artístico y técnico durante años).

Si, en su defecto, lo que pretenden es que el protagonista no infiera en la historia y deja que los acontecimientos se sucedan tal cual él conoce de antemano, no sólo se desaprovecha una propuesta argumental interesante, sino que la historia esta condenada a su trágico final, que como ya dijimos antes es impropio de esta serie. No sólo porque no se ubica en el contexto de género cómico, sino por el desolador mensaje que lanza a su audiencia millonaria: “si te van mal las cosas, el único camino que te queda es suicidarte”. Y tan panchos.

Como dice una ilustre bitacorista televisiva, lo malo de las series españolas no es que copian, sino que plagian mal.

ÚLTIMA HORA

Mientras ultimaba el artículo una lucecita se ha encendido en mi destartalado cerebro y me ha asaltado una duda: ¿Y si ésta no fuera la lectura correcta de las imágenes? ¿Y si los guionistas pretendían algo muy distinto? Así que mañana ofreceré la visión alternativa a este polémico final de una de las series estrella de la historia de la televisión en nuestro país...

Dormirse al volante


El periodo estival es una época sensible a los accidentes de tráfico. Como ya hemos tocado ese asunto en otra ocasión, esta vez queremos apelar a la responsabilidad de los conductores a través de una campaña de publicidad creada por Clemenger BBDO Wellington, en la que los vehículos se sustituyen por camas.

Puede que Nueva Zelanda sea nuestras antípodas en lo geográfico, pero el índice de siniestralidad por dormirse conduciendo es similar al nuestro. Por tal motivo, la Policía y algo así como la DGT neozelandesas han colaborado juntas en la campaña "Sleep Before You Drive", con fotografías de Mat Blamires y retoque en photoshop de Geoff Francis, para concienciar a los australianos del peligro que conlleva la fatiga al volante.





PUBLICIDAD Y SUEÑO AL VOLANTE:

¿Te gusta conducir?... ¡Pues duerme primero!



La mala publicidad puede hacerte perder consumidores



21 jul 2008

Siento, luego existo


La desproporción se ha adueñado de nuestra conducta. Tanto para lo bueno como para lo malo. Una causa externa sea quizás el poso de los mensajes publicitarios de las últimas décadas, construidos en función de términos absolutos: “el que lava más blanco, la mejor del mundo, no hay nada igual, olvídate de todo, lo demás no importa”… Nos hemos acostumbrado a un lenguaje rimbombante: el partido del siglo, el polvo de mi vida, la casa de tus sueños, el equipo del milenio… Muchas mujeres siguen diciendo que el de su boda es el día más feliz de sus vidas, aun cuando los estudios nos dicen que muchas saben ya entonces (o acaso intuyen) que el hombre que han elegido para compartir el resto de sus vidas es un maltratador en potencia.

La peligrosa tendencia a emocionalizarlo todo (con la que también enreda la publicidad) nos convierte en seres frívolos, vulnerables y desbocados. La vorágine diaria nos arrastra al mundo de las sensaciones y nos aleja de las ideas y la reflexión. Amamos, deseamos, odiamos, sufrimos. Las noticias nos estremecen, el sueldo nos alivia, los exámenes nos estresan, el sexo nos relaja…

Anhelamos vacaciones, pero desconectamos de un mecanismo alienante (el trabajo, los estudios, la casa…) para sumergirnos en otro contexto igualmente peligroso; porque (ahora más que nunca) se entiende el descanso como una oportunidad de experimentar nuevas sensaciones. Son pocos los que invierten su tiempo libre en la beneficiosa y acaso olvidada tarea de pensar. Necesitamos horas para observar la vida, desmenuzarla, entenderla y posicionarnos ante lo que nos rodea. Las vacaciones son el mejor regalo posible cuando lo que obtenemos es precisamente eso: tiempo. Para invertirlo e incluso para despilfarrarlo en pensar y pensarnos, en proyectar y proyectarnos.

Pero la mayoría sustituyen unas emociones por otras, convencidos de que en el cambio está la ventaja. El retorno a la cotidianidad es con frecuencia frustrante. En apariencia porque hemos dejado de hacer lo que nos gustaba por hacer lo que debemos; pero la realidad es otra: estamos exhaustos, agotados de tanto sentir.

Debemos dejar de interpretar la realidad sólo a través de los sentimientos y las emociones o acabaremos sintiéndolo.

ilustraciones de ARTHUR DE PINS
web oficial
en myspace
animaclip: "l'eau de rose"
(!)

16 jul 2008

Niños, desnudos e Internet

Maravillosa campaña de la agencia brasileña Neogama/BBH para concienciar a los adultos de la conveniencia de mantener seguro cierto ámbito de la Red. "Los niños pueden aprender muchas cosas en Internet" reza un eslogan demasiado amplio en apariencia y muy directo en el subtexto...


No cabe duda de que estos ovejas negras de la publicidad han sabido encontrarle el punto a "la erótica de los peluches". ¿Se imaginan a Joe Coker cantando aquello de "You Can leave Your Hair On"...?


CRÉDITOS:

Advertising Agency: Neogama/BBH, São Paulo, Brazil
Executive Creative Director: Alexandre Gama
Creative Directors: Márcio Ribas, Wilson Mateos
Art Director: Daniel Prado
Copywriter: Patricia Leme
Photographer: Gustavo Lacerda
Digital Retouch: Alessandra Perez
Modelmaker: Zsa-Zsa Fantini



15 jul 2008

Crimen y Castigo


Sucede habitualmente en el mundo del deporte: se pasa de denostar a alguien a ensalzarlo en cuestión de meses o semanas. Ahí tienen a Luis Aragonés. Los mismos que alentaron la desestabilizadora campaña de “Raúl Selección” le agasajaban en sus platós tras la Eurocopa. El caso opuesto también se da: Fernando Alonso ha pasado de ser un héroe nacional al tipo más antipático de los circuitos. Y el Ronaldinho protagonista de tebeos infantiles es ahora icono recurrente en viñetas paródicas que se mofan de él.

El acoso y derribo de Laporta es sintomático. ¿A cuento de qué viene forzar su dimisión tras un plebiscito que ha superado? Se eligió el camino de la moción para derrocarle, y lo que consiguieron fue legitimarle hasta el 2010. Si, además, el presidente reconoce el voto de castigo y asegura que obrará en consecuencia ¿qué más quieren quienes desean echarle desde el propio club con la complicidad de la prensa especializada? La respuesta es obvia: el castigo, a poder ser ejemplar.

No es éste un país comedido. “El que la hace la paga”, se suele decir. Da igual que se trate de estafa inmobiliaria, cohecho o retrasos en un avión. Los perjudicados siempre exigen la pena máxima. Si has estado tirado en el aeropuerto dos días pretendes viajar gratis el resto de tu vida. Si te han dejado sin luz una semana, es “justo” no volver a pagar jamás un recibo. Si te han timado 10.000 euros quieres que te devuelvan la cantidad multiplicada por diez, o por cien…

El valor que le damos a nuestro tiempo, reputación, integridad o dolor es subjetivo y por tanto impreciso, desmedido, absurdo. Ante el agravio no nos basta con la compensación; aspiramos al desquite.

No quiero imaginar qué sería de este país si la pena de muerte no hubiera sido abolida. Presumo que se solicitaría “por defecto”. Almería no es lo único que nos conecta con el Far West; también está Lynch, no el cineasta sino el precursor de la soga al cuello. Muy a menudo la reacción popular ante el crimen suele ser no tanto la justicia como la venganza. La Ley del Talión, al contrario de lo que se piensa, no incitaba a la violencia sino que pretendía acotarla. En el contexto del “ojo por ojo” una chica que corta con el novio “merece” que su novio corte con ella, no que los familiares del chico agraviado la secuestren, vejen y torturen durante meses para escarmentarla.


ilustraciones: dholl y benjamin guy - via: devianart

11 jul 2008

Los poderes del agua / 4

Este artículo forma parte del monográfico: CINE Y AGUA



Poder regenerador

Se sabe que “tomar las aguas” produce efectos beneficiosos para la salud; o eso es lo que buscan muchos de los enclenques clientes de un extravagante Anthony Hopkins en “El balneario de Battle Creek”.

En la rayharrihausiana “El viaje fantástico de Simbad” el intrépido marino de los siete mares conduce a un príncipe amigo hasta una fuente prodigiosa donde pueda recuperar su aspecto físico degradado por un hechizo.

Similar premisa del agua sanadora vemos en otros films, como “La fuente de la vida” o “Indiana Jones y la última cruzada”, donde en un desesperado acto de fe Indy vierte el agua contenida en el Santo Grial sobre la mortal herida de bala de su padre y ésta sana milagrosamente.

“—El poder curativo del Grial es lo único que puede salvar a su padre. Es hora de que se pregunte en qué cree usted…”

La variante del agua que concede la eterna juventud ha sido ampliamente utilizada tanto en dramas, al estilo de la capriana “Horizontes perdidos”, como en comedias: “Tuck everlasting”, “The fat spy”, “Star Trek: Insurrección”...

Pero sin duda el referente más simpático y popular es la estimulante “Cocoon” y su inmediata secuela, en la que tras bañarse furtivamente en una piscina que aloja unos enigmáticos capullos, los abuelitos de una residencia cercana empiezan a sentirse vigorosos y revitalizados.

Una mejoría notable en su artritis, aunque no tan espectacular como la de sus seniles compañeros, es la que experimenta Arthur Abbott, el guionista jubilado al que Kate Winslet ayuda a ponerse en forma para su merecido homenaje en “The Holiday (Vacaciones)”. Gracias a sus paseos en la piscina, el oscarizado escritor consigue fortalecer sus piernas y subir las escaleras hasta el escenario donde su talento y el de toda una generación de guionistas es homenajeado.

PRÓXIMA ENTREGA: Poder recreativo



CINE Y AGUA
poderes del agua en el cine 1, 2, 3, 4
el agua como elemento dramático: Pis-cines
cine y lluvia
cine y paraguas
cine y nubes

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7 jul 2008

Triunfo de lo colectivo


Buscando una explicación a la espectacular y aunque anhelada no por ello inesperada hazaña de la selección española de fútbol se han enfatizado dos puntos clave: que el equipo ha sido una piña y que han jugado un fútbol de gran nivel, el mejor de Europa. En otras palabras, el éxito ha llegado a consecuencia de hacer lo que se supone que debían hacer: jugar como un equipo. ¿Por qué nos sorprende?

Los grupos se constituyen por un objetivo común: el ser campeones, triunfadores, líderes o sencillamente felices; se trate de una empresa, un partido político, un equipo deportivo o una familia. Sin embargo la realidad confirma el permanente gatillazo de lo colectivo. En el ámbito de los negocios es frecuente que los empleados detesten al jefe por considerarlo explotador, antipático, incompetente o todo a la vez. Por su lado, los jefecillos se enzarzan en disputas maquiavélicas y traicioneras para obtener mayor poder en la misma compañía. Por no hablar del mobbing, el acoso, los contratos basura o la institucionalización del Departamento de Chismes.

En lo deportivo, estrellas de antaño abandonan los clubs por la puerta de atrás y las filtraciones de vestuario constatan un universo conflictivo de egos en lo que aparenta un conjunto bien avenido. Pilotos de la misma escudería que se hacen pirulas, tenistas que se enfrentan a la Federación por la ubicación de la pista, jugadores que no cobran se declaran en huelga, denuncias entre compañeros, fuego cruzado de declaraciones, envidias, destituciones, mociones de censura…

Los partidos políticos son un pésimo ejemplo de esa unidad que favorece el éxito: retiradas reversibles, transfugismo, declaraciones públicas de concordia que ocultan cruentos fratricidios… En cuanto a la crisis de la familia (o desaceleración del afecto familiar), basta leer los periódicos: divorcios, violencia de género, enfrentamientos por la herencia, batallas legales por la custodia de los hijos, el apartamento o la mascota… En resumen: el fracaso de la experiencia en común.

Dicen que el individuo necesita compartir sus emociones con los demás y de ahí el éxito del deporte. Pero lo cierto es que no sabemos unirnos; salvo los prosélitos de la globalización, que funden sus intereses personales en el bien común capital… Quiero decir: en su bien común, el capital.



ilustraciones de: aeset - vía: devianart

4 jul 2008

El agua en "La lista de Schindler"


Este artículo forma parte del monográfico: CINE Y AGUA.

Aunque hablamos en otros artículos del uso del agua como metáfora y sistema de imagen en las películas, comentamos aquí dos secuencias del oscarizado film de Steven Spielberg sobre guión de Steven Zaillian. En ambas el agua alcanza una significación extrema:

La primera tiene lugar en el andén de una estación:


Mientras los mandos nazis toman un refrigerio alegremente, cientos de judíos deportados se asfixian en el interior de un tren de la muerte que aguarda la orden de partir. Oskar Schindler se siente conmovido y se arriesga a contrariar a los militares. Coge una manguera y riega los vagones. El momento está cargado de tensión, ya que Schindler intenta hacer pasar su acto de caridad como un juego que divierta a los soldados.

Entre risas, el cínico Amon Goeth (Ralph Fiennes) le grita que eso que está haciendo con los deportados “es cruel, porque les da esperanza...”.



La risa forzada del industrial alemán (Liam Neeson) y el miedo a ser ejecutado allí mismo contrasta con las imágenes de los prisioneros sedientos refrescándose con las gotas de agua que se filtran por las rendijas…

La segunda secuencia es aún más sobrecogedora:


Al llegar a Auswitz un grupo de mujeres es obligado a entregar sus pertenencias y a desvestirse. Después se las obliga a entrar en una nave oscura con olor a muerte. En una hábil maniobra narrativa, el guionista nos ha mostrado con anterioridad otra secuencia en la que una mujer explicaba a otras cómo los nazis aniquilaban a los prisioneros en las cámaras de gas (lo que en terminología guionística se conoce como planting). Los detalles de su relato toman forma ahora en las tuberías que serpentean la nave, el pavor en los rostros de las mujeres desnudas y su llanto desconsolado. De pronto un chasquido y las duchas empiezan a descargar su contenido sobre las prisioneras. Sus gritos de espanto van dando paso a los de liberación cuando se van dando cuenta que lo que cae sobre ellas no es gas letal sino simplemente agua… ¿Prevención de enfermedades o broma de mal gusto de sus carceleras?

En ambos ejemplos, los cineastas (los dos stevens con la colaboración de la impecable fotografía del también oscarizado Janusz Kaminski) canalizan el potencial dramático del agua, que actúa como bálsamo en medio de un sufrimiento insoportable.


CINE Y AGUA
secuencia del tren (min. 2,30 a 6)
web oficial de la película
steven zaillian
análisis dvd (zonadvd)
(!)

3 jul 2008

Día sin bolsas de plástico

Cataluña celebra hoy el Día sin bolsas de plástico, jornada ecológica que pretende cambiar los hábitos y animar a comerciantes, entidades y usuarios a reducir el número de bolsas de plástico de un solo uso. No hay momento mejor para recordar aquella hipnótica secuencia de la oscarizada "American Beauty"...



bolsas contaminantes
la venganza de la bolsa
catalunya libre de bolsas
prevención de residuos
consum responsable
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—¡Soy una homeless! Seré una mujer con una bolsa en la mano. Una bolsa marca Fendi, ¡pero una mujer con una bolsa en la mano!

Sexo en Nueva York, escrito por Darren Star.