El mejor sketch de la semana no ha sido propuesto por la versión castiza del “Saturday Night Live”. El programa de Cuatro, que se prometía fresco y regenerador de la hilaridad en el país, huele a rancio y pólvora mojada. Arranca pocas (poquísimas) risas, los ratings fruncen el ceño y la crítica se despacha a gusto…
Encabezando la lista: Alicia Sánchez Camacho y la campaña obamista del PPC. Su lema es: “Porque Cataluña también tiene derecho a la ilusión”.
De momento lo que priva en el país es el ilusionismo, con tanto mago en el escenario intentando distraer nuestra atención para que no descubramos sus torpes trucos.
Por ejemplo: proponiendo austeridad desde el Govern de Catalunya y gastándose ellos mismos 154.000 euros en un viajecito a Japón. A mí me recuerda al humor de Abbott y Costello, con tanto fantasma suelto.
El PPC propone “100 soluciones para combatir la crisis” y utiliza al mismísimo Barack Obama para llamar la atención. Alicia nos cuenta que han querido “trasladar la imagen que él ha dado de ilusión, esperanza, confianza y capacidad de liderazgo.” O sea: utilizan un icono “de los otros” para apoyar la propuesta propia. Algo así como si Joan Laporta planteara “100 propuestas para ganar la Copa de Europa” mostrando imágenes del Santiago Bernabeu y sonando de fondo el “¡Hala Madrid!” porque las vitrinas del club merengue transmiten esa imagen de conquista, regularidad y hegemonía europea.
Tras los pasos de Eva Hache, la líder popular (ahora se hacen llamar “POP” porque es más “cool”, aunque no sé si lo que han colocado entre las siglas del PP es una “O” o un cero, porque aporta bien poco a la imagen que se tiene de ellos), la líder POP -decía- asegura que no intentan asumir ninguna posición política y que, de hecho, no comparte el programa del presidente norteamericano. (!)
¿Y cómo creen que Obama ha conseguido transmitir esa ilusión (de la que ellos quieren apropiarse) para llegar al trono del poder (objetivo final de la humorista)? ¿No será por su raza, su carisma personal y, quizá, su programa político?
Lo mejor para el final: ¿Saben qué fragmento del discurso de Obama aparece en el spot del PPC? Aquel en el que achaca la debilidad de la economía “a la codicia y la irresponsabilidad de algunos”. No me dirán que no es para troncharse.
Sobre el particular déjenme expresar mi perplejidad al ver que el sketch con el que abrieron el segundo programa (con Paco León como maestro de ceremonias) era idéntico a uno que protagonizó Emilio Aragón con sus guionistas de “Vip Noche”, caracterizados de agentes de seguridad, hace ¡diecisiete años!Por fortuna florece una generación de nuevos cómicos que garantizan nuestra diversión.
Encabezando la lista: Alicia Sánchez Camacho y la campaña obamista del PPC. Su lema es: “Porque Cataluña también tiene derecho a la ilusión”.
De momento lo que priva en el país es el ilusionismo, con tanto mago en el escenario intentando distraer nuestra atención para que no descubramos sus torpes trucos.
Por ejemplo: proponiendo austeridad desde el Govern de Catalunya y gastándose ellos mismos 154.000 euros en un viajecito a Japón. A mí me recuerda al humor de Abbott y Costello, con tanto fantasma suelto.
El PPC propone “100 soluciones para combatir la crisis” y utiliza al mismísimo Barack Obama para llamar la atención. Alicia nos cuenta que han querido “trasladar la imagen que él ha dado de ilusión, esperanza, confianza y capacidad de liderazgo.” O sea: utilizan un icono “de los otros” para apoyar la propuesta propia. Algo así como si Joan Laporta planteara “100 propuestas para ganar la Copa de Europa” mostrando imágenes del Santiago Bernabeu y sonando de fondo el “¡Hala Madrid!” porque las vitrinas del club merengue transmiten esa imagen de conquista, regularidad y hegemonía europea.
Tras los pasos de Eva Hache, la líder popular (ahora se hacen llamar “POP” porque es más “cool”, aunque no sé si lo que han colocado entre las siglas del PP es una “O” o un cero, porque aporta bien poco a la imagen que se tiene de ellos), la líder POP -decía- asegura que no intentan asumir ninguna posición política y que, de hecho, no comparte el programa del presidente norteamericano. (!)
¿Y cómo creen que Obama ha conseguido transmitir esa ilusión (de la que ellos quieren apropiarse) para llegar al trono del poder (objetivo final de la humorista)? ¿No será por su raza, su carisma personal y, quizá, su programa político?
Lo mejor para el final: ¿Saben qué fragmento del discurso de Obama aparece en el spot del PPC? Aquel en el que achaca la debilidad de la economía “a la codicia y la irresponsabilidad de algunos”. No me dirán que no es para troncharse.
23 perplejos apuntes:
No me puedo contener. Saturday Night Live es el gran bluf del 2009!!!! Ahí va artículo sobre el tema, por si lo quieres adjuntar en tu entrada:
EL FIASCO DE SNL
La capacidad de inventar o de sorprender en televisión es cada vez más limitada, por lo que el reciente anuncio de Cuatro de lanzar en su parrilla una versión hispana de un espacio histórico como es Saturday Night Live (SNL), en antena en los Estados Unidos desde 1975 a través de la cadena NBC, había provocado algo de expectación. SNL, con sus defensores y sus detractores, es todo un referente. El formato tampoco es que tenga demasiado secreto: un espacio semanal, en directo (recuperando la esencia de hacer televisión sin largas sesiones de grabación, con los espectadores encima, a escasos metros) y con un grupo de actores y actrices que desarrollan sketches, repasan la actualidad de la semana (con una parodia de informativo), y cuentan en cada ocasión con un grupo de invitados que participan de los diferentes gags.
Uno de los invitados, además, se encarga de desarrollar un monólogo inicial y de conducir todo el programa. Una mezcla, pues, entre la estética de de un típico espacio de gags y la dinámica de un late night al uso (actualmente, en España tan sólo se mantiene, y con un alto nivel, Buenafuente, mientras en Estados Unidos, David Letterman, Oprah Winfrey, Jay Leno o Conan O´Brien son sólo algunos de los ejemplos más célebres). La producción hispana es a cargo de Globomedia (responsable de proyectos de buena factura como el añorado El informal o Noche Hache) y cuenta con un reparto fijo de cinco actores: Eva Hache (Noche hache), Edu Soto (el Neng o el Mario Olivetti de Buenafuente), Secun de la Rosa (Aída), Yolanda Ramos (Homo zapping) y Gorka Otxoa (Vaya semanita). De entrada, cinco personajes que, en distintos programas, han demostrado tablas y capacidad cómica, pero que juntos y revueltos pierden gas, especialmente Hache y Ramos, que se diluyen un poco, mientras Soto y De la Rosa son los únicos en ofrecer unos, aunque escasos, momentos de cierto humor.
En el primer programa la estrella invitada fue Antonio Resines. De acuerdo, Resines ha ofrecido grandes papeles en el cine (La buena estrella, Carreteras secundarias o El tiempo de la felicidad), pero televisivamente le puede el estigma de su papel en Los Serrano, una serie que no es precisamente Perdidos o Dexter. Y ahí está el problema, que actuó en SNL como de si de una prolongación de la serie se tratara, con ese tono costumbrista que pretende ser gracioso pero que se queda a medio camino, incapaz de arrancar la más leve sonrisa. En ese primer programa (el jueves 5 de febrero), las participaciones de Pepe Viyuela, Fran Perea, Nuria Roca (presentando tendrá su qué, pero como actriz no ganará nunca un Goya) y Dani Martín tampoco aportaron nada, en unos gags sin ritmo, alargados hasta la saciedad y más cercanos al humor cutre de Escenas de matrimonio que al más depurado que provienen de ofertas tan dispares como el mismo Buenafuente (La Sexta), Muchachada Nuí (prometo artículo de este, mi programa favorito, en La 2) o los programas de satira política y deportiva que se emiten en la televisión catalana, TV3, como son Polònia y Crackòvia. Así, el único momento “salvable” del primer programa fue el encuentro inicial de Resines en un ascensor con los distintos actores del programa, en un gag donde las aportaciones de Secun de la Rosa (un hincha del Atleti que le recrimina a Resines lo cutre del final de Los Serrano, que con un sueño se carga 147 episodios) y de Edu Soto (un repartidor de pizzas que confunde a Resines con Tito Valverde, de El comisario) fueron las únicas notas de cierto nivel. El resto, una sucesión de gags sin pizca de gracia, especialmente el que tenía lugar en un restaurante italiano, donde Núria Roca sufría el acoso de los camareros, un gag que no tan sólo no arrancaba ni una sonrisa, sino que ¡tenías ganas que terminara!. Una parodia del grupo de rock Barón Rojo y otro de un concurso japonés, alargado como un chicle hasta el cansancio, tampoco elevaron el listón. ¿Y qué decir del informativo? Forzado e insulso, la verdad. Lo que quería, pues, convertirse en la niña de los ojos de Cuatro, empezó muy, muy flojo. Lo peor del caso es que ni tan sólo se ha apostado por la aportación de guionistas nacionales para dar algo de chispa, ya que la mayoría de gags (hasta el monólogo inicial de Resines) eran una copia extraída de un reciente espacio en la versión americana (y encima, una copia mal hecha, ya que he visto algunos de ellos en la versión original y tienen más gracia). Las comparaciones son odiosas, lo sé, pero no es lo mismo ver a Resines intentando explicar el porqué de un sueño en el final de Los Serrano (serie que no critico al casi no haberla visto, que conste, por pura pereza) que a Mathew Fox, el Jack de Perdidos, hablando en el mismo ascensor sobre si se ha enterado que está en una isla o por qué mataron a Mr. Ecko. Para rizar el rizo, la actuación musical del día fue a cargo de El Canto del Loco, un grupo cargante, más malo que pegar a un padre y visitante habitual en todos los politonos, anuncios y programas del mundo, en una actuación que sonaba más a la típica de promoción (ya saben, nuevo disco, rueda de visitas a una docena de programas) que no a algo de calidad.
En definitiva, se puede ser gracioso, irónico, petardo o socarrón, pero el SNL español no consigue nada de esto. Pero ni que sea por eso del beneficio de la duda, decidí tragarme la segunda emisión del programa (el pasado jueves, 12 de febrero) para ver si la cosa mejoraba. Pues no. La concatenación de gags malos continuaba. Además (como si todavía no hubiéramos superado lo de la era del destape o algún trauma infantil), la acumulación de sketches con alusiones sexuales baratas y hasta de mal gusto, asustaba. Así, una parodia de un programa infantil, en la que los actores formaban con sus camisetas la palabra puta, rayaba el nivel de un chiste de Arévalo o el de los que los niños cuentan a los siete años en el patio cuando descubren las palabras culo o teta. A continuación, un marido intentaba convencer a su esposa que si llegaba cada día a las tantas es porque sufría el llamado Síndrome del Pene Inquieto (lo dicho, otro gag de mal gusto y que no llegaba ni al nivel de Escenas de Matrimonio,un espacio que tampoco es para ir recomendándolo, pero del que al menos se sabe a lo que juega). Y ya para completar la trilogía, un gag sobre la presencia de un voyeur como testigo en una rueda de reconocimiento en una comisaría, donde hasta el gran Paco León (Aída) acababa dando grima en el papel de un pervertido que, de gracia, poca, muy poca.
En resumen, humor chabacano, gags absurdos y hasta desagradables, con un exceso de alusiones sexuales. Y no, no se trata de un mensaje puritano, pero es que ese tipo de humor se quedó anclado en la época del landismo. Hoy, esperamos algo más, mucho más, por lo que si tienen ganas de reir, lo dicho, a zambullirse en la esfera Buenafuente, en la de Joaquín Reyes y compañía o en la de espacios de cadenas autonómicas como TV3 o Euskal Telebista.
Al otro lado del charco, el programa SNL lleva 34 años en antena y se ha consagrado como un verdadero termómetro de la actualidad política y social del país. No se trata de entrar en las, de nuevo, odiosas comparaciones, pero entre las docenas de nombres de actores que han formado parte del programa encontramos figuras como las de John Belushi (un añorado Blues Brothers, muerto hace ya 26 años, cuando sólo contaba con 33), Steve Martin (ahora, de nuevo, en la piel del inspector Clouseau en una nueva entrega de La Pantera Rosa), Andy Kaufam (personaje que Milos Forman llevaría al cine con Jim Carrey en la espléndida Man on the moon), Eddie Murphy, Mike Myers, Chevy Chase, Bill Murray (que siempre vivirá en el eterno Día de la Marmota), Billy Crystal (uno de los grandes anfitriones de las galas de los Oscar) o, para mi, dos de los mejores actores de comedia actuales, como Ben Stiller y Will Ferrell (no se pierdan Patinazo a la gloria). En tres décadas y media, lógicamente, el programa ha ofrecido buenos y malos momentos, pero siempre ha intentado ser una válvula de escape para regalar sanas parodias de las propias estrellas del celuloide, políticos o músicos que visitan, o no, el show, así como una visión sarcástica e irónica de una sociedad como la estadounidense. La versión hispana, lo dicho, no aporta nada más que cansancio y ganas de cambiar de canal (el pasado jueves lo hice a tiempo de pillar una serie fabulosa como es Mentes criminales. Sí, en Tele 5, lo siento) o de leer.
Qué grande eres perplejo! Me ha encantado cómo has enlazado los dos temas, y con lo de usar a Obama como imagen tienes toda la razon del mundo. Además supongo que habrán pagado buen dineral por poder hacerlo. Se habrán tomado en serio los del PP aquello de "buy american" :-D
Kowalski: bueno el artículo sobre SNL, pero igual no estaría de más poner el enlace directamente o nombrar al menos al autor, no? A no ser que lo hayas escrito tú, claro!
Ok, al artículo Kowalski. También me "tragué" los dos primeros, aunque soy incapaz de recordar tanto detalle de tal despropósito... pero, ¿para qué hacen falta guionistas si los productores ya lo saben hacer todo?
Perplejo, lo del PoP (PPC) -me da grima hasta escribir las iniciales- me ha hecho llorar... de la risa ¿Cómo se puede ser tan ridículo? Y que conste que me da igual la mentalidad política. Si trabajara para ellos, les hubiera recomendado mejor usar la imagen del Ché. Tras la película con Benicio del Toro, es quizá un poco menos relevante que Obama pero más justificado para su campaña: la revolución, hay que ir contra el opresor que nos engaña, en contra de los generadores de esta crisis, ¡levantémosnos hermanos!
No sé, aunque políticamente tampoco estuvieran de acuerdo, a lo mejor conseguían más votos que con su progrma y sus caras... tal y como le pasó al "quetepegoleches", que consiguió ser eurodiputado.
¡Este paíssssss!
¡Únete! ¡Un palabro - una peli!
Palabro: reave
Película. El Reave león
Saludetes!
Lo bueno del humor, y de ahí viene su sentido, es que puede aparecer en cualquier momento, sin pretenderlo siquiera... el humor no se puede etiquetar, empaquetar, ni vender, dijo woody allen en una entrevista, y creo que él sabe bastante del tema... en el artículo perplagio tenemos una buena muestra...
El genial artículo que kowalski ha puesto en su comentario puede verse íntegro aquí:
http://www.protestantedigital.com/new/nowleernoticiaDom.php?r=265&n=12570
Me interesa poner el link, porque en el último párrafo habla de mi, y porque su autor, Jordi Torrents, es muy bueno... por cierto, que tiene una novela de título Suena Kowalski... bonito mundo este de las coincidencias
Sí que ha salido flojo el Thursday Night Live. De todos modos, es normal que recordemos sketches de "Ni en vivo..." porque los de SNL lo han comprado todo, según creo: guiones incluidos. Y "Ni en vivo...", con lo que nos gustaba, tenía un montón de sketches cogidos directamente del SNL original (I'm Chevy Chase and you're not).
De la política pop ya ni hablo: entre el hombre bicho y esto, ¿qué será lo próximo la semana que viene?
¡Únete! ¡Un palabro - una peli!
Palabro: reave
Película. El Reave león
Me uno:
Palabro: picara
Película: Valpícara
Gracias, cosapequeñaazul.
;)
Palabro: Cyterle
Peli: Cyterle de Bergerac
Saludetes!
Tenian que ser los del PP...puff! Tienes razón perplejo, estos humoristas me hacen reir más que los de humor amarillo.
Muy bueno el articulo Kowalski.
Palabro: dette
peli: Superdettetive en Hollywood
No me extrañaría que esa campaña del PP estuviera copiada de algún sketch de Polònia.
Kowalski: Chico, aquí puedes decir lo que quieras... pero ábrete un blog.
Kowalski: En cuanto a tu artículo: "Man on the moon" ... ¿espléndida?. A mí me provocó lo que ninguna otra película: levantarme de la butaca y caminar por el pasillo para sacudirme el sopor y la angustia (el cine estaba vacío). Más o menos me produce la misma ansiedad Will Ferrell, que debe ser una de las personas que más grima me producen en la pantalla (a excepción de en "Más extraño que la ficción"). Sobre todos los demás no tengo más que elogios. Mi duda es cómo siendo tan buenos ellos (y ellas) la mayoría de los sketches que he visto de SNL original son tan poco graciosos. Mucha leyenda...
Extraño: Si encima han pagado por usar la imagen "del otro" aún es más surrealista.
Soldado: Normalmente los políticos me impelen a escribir irritado. En este caso me divirtieron. Por otro lado, desconozco si entre su 100 propuestas han incluido la de aprovechar sinergias entre partidos distintos que quieren lo mismo y de la misma forma, o continuarán peleándose por diferenciar sus vacuos discursos.
DJ: ¿Cómo que el humor no se puede etiquetar, empaquetar y vender? ¿Y mi colección de cassetes de "Arévalo", "Pepe da Rosa" y "La charanga del tío Honorio", adquiridos en la red de gasolineras del país qué?
SBT: Los sketchs de SNL (comprados o no) hacen divertida "La hora de José Mota" y su Tío la Vara. Anoche vi una parodia de "Cuaro Milenio" que te tronchabas.
Patty: No me animes a Kowalski, que me lo veo intercalando más artículos en los comentarios...
Al: El equipo del "Polònia" tiene un mérito increíble: hacen humor diario, pegado a la actualidad, re-definen personajes (las copias son más populares que los originales y estos buscan parecerse a sus imitaciones), hacen propuestas, crean iconos y eslogans... Son como una agencia de publicidad competente que diseña campañas oficiosas para divertirse y divertirnos.
A mí no me parece que Arévalo, o Chiquito de la Calzada, otro clásico de las gasolineras, estén empaquetados. Ellos mismos han confesado más de una vez, como en su dia Barragán, que la mayoría de sus grandes actuaciones (incluso las recogidas en cinta de gasolinera) fueron en su gran parte fruto de la improvisación, y hasta de la falta de ensayo... no recordemos que esta gente hacían personajes... para nuestra sorpresa, no eran así en la vida real... bueno, puede que haya alguna excepción...
palabro: fisthe
peli: antwone fisther
La diferencia está en que en una agencia de publicidad se pueden pasar meses intentando sacar adelante un solo gag. Y si tienen éxito y le gusta al público, el anunciante les obligará a repetirlo hasta la saciedad.
En cuanto a lo de las agencias... si el gag conseguido después de meses no tiene "algo que ver" con un manadmás, nunca tiene gracia.
Palabro: pawasd
Peli: El sastre de Pawasdá
Saludetes!
DJ: Desde el mismo momento en que alguien hace humor se le etiqueta: se parece a, recuerda a, homenajea a, sale en el programa de, es un fijo de la cadena tal... Aun saliendo alguien con un muy personal estilo (como Berto o Jordi Évole, por ejemplo), no pueden evitar que se les identifiquen como "chicos Buenafuente"...
Al Eso dice mucho sobre los "polacos" y bastante poco sobre los clientes de agencia.
Soldado: Ni gracia ni futuro, por lo visto.
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