La imagen popular de sus producciones es de candor y ternura, envueltos en musicalidad y comedia bufa, con cierta tendencia a lo empalagoso (propensión parodiada magistralmente por “Shrek”). Sin embargo, a Disney siempre le fascinó el lado oscuro de los cuentos. De hecho, sus villanos –y en especial sus villanas- son sus más logradas creaciones: Maléfica, Cruela de Vil, las pérfidas madrastras… No recuerdo haber pasado miedo como niño en las secuencias más sombrías de sus Clásicos; pero, como padre, algunas me aterran al revisionarlas con mis hijos: la orden de arrancar el corazón a Blancanieves y el momento de su (casi) ejecución son realmente espeluznantes.
Sorprende la preocupación política por la defensa del catalán en la distribución cinematográfica, mientras la clasificación por edades parece traérsela al pairo. Quizá les alarme llevar la contraria a la poderosa factoría de animación, pero “Tiana y el sapo” es cualquier cosa menos un dulce e inocente divertimento para todos los públicos.
Aderezada con el encanto del jazz de Nueva Orleáns, los secundarios cómicos de siempre y un impecable uso de la iluminación, se nos presenta como la vuelta de tuerca a los cuentos de princesas, donde el beso al príncipe encantado no deshace un conjuro sino que lo reproduce.
Anda tras el embrujo el Dr. Facilier, maquiavélico hechicero, siempre rodeado de pavorosas sombras, apelando a las fuerzas oscuras del más allá, sus “amigos del otro lado” que acaban arrastrándolo a los infiernos como al malo de Ghost en una secuencia tan escalofriante como aquella. Este personaje vil protagoniza números musicales cual loas, rodeado de calaveras y muñecos vudú en macabra coreografía, donde se enaltecen la santería y el tarot. Sorprendentemente, la aliada de los protagonistas para anular el encantamiento es una anciana bicentenaria (simpática y cantarina, of course), que recurre a las mismas lóbregas prácticas en la más profunda oscuridad de los pantanos.
El argumento es un despropósito, la coherencia de los personajes forzada y caprichosa, y el ritmo vacilante. Pero nada comparado con su perverso anclaje en lo siniestro y el presumible efecto que éste pueda ejercer sobre chiquillos de cinco años.
Sorprende la preocupación política por la defensa del catalán en la distribución cinematográfica, mientras la clasificación por edades parece traérsela al pairo. Quizá les alarme llevar la contraria a la poderosa factoría de animación, pero “Tiana y el sapo” es cualquier cosa menos un dulce e inocente divertimento para todos los públicos.
Aderezada con el encanto del jazz de Nueva Orleáns, los secundarios cómicos de siempre y un impecable uso de la iluminación, se nos presenta como la vuelta de tuerca a los cuentos de princesas, donde el beso al príncipe encantado no deshace un conjuro sino que lo reproduce.
Anda tras el embrujo el Dr. Facilier, maquiavélico hechicero, siempre rodeado de pavorosas sombras, apelando a las fuerzas oscuras del más allá, sus “amigos del otro lado” que acaban arrastrándolo a los infiernos como al malo de Ghost en una secuencia tan escalofriante como aquella. Este personaje vil protagoniza números musicales cual loas, rodeado de calaveras y muñecos vudú en macabra coreografía, donde se enaltecen la santería y el tarot. Sorprendentemente, la aliada de los protagonistas para anular el encantamiento es una anciana bicentenaria (simpática y cantarina, of course), que recurre a las mismas lóbregas prácticas en la más profunda oscuridad de los pantanos.
El argumento es un despropósito, la coherencia de los personajes forzada y caprichosa, y el ritmo vacilante. Pero nada comparado con su perverso anclaje en lo siniestro y el presumible efecto que éste pueda ejercer sobre chiquillos de cinco años.
19 perplejos apuntes:
Estoy de acuerdo, y aún así, en algunas pleículas se anduvieron con ojo, porque en el original de la Sirenita, no es úrsula le quitara la voz sin más, no. Es que le cortaba la lengua. Y al final, la Sirenita, sin aber podido conseguir el amor del príncipe, se moría, convirtiéndose en luz, o algo así [ahora mismo no recuerdo en qué era exactamente, pero era algo bastante cruel].
Yo también fui al cine con mi hija de 4 años, y me sorprendio, lo duro de algunas de las escenas. Tienes razón, habría que revisar la calificación por edades.
Un saludo
Vaya por delante que no he visto la película, ni tengo intención alguna; pero siempre es bueno saber otra versión de lo que nos están vendiendo: “La primera vez que Disney crea una protagonista que no tiene nada que ver con una princesa al uso: feminista, trabajadora independiente que no precisa de ningún apuesto príncipe; y además con el color de piel que tan de moda está en Estados Unidos”.
Aunque por otro lado no sé de qué te perplejas tanto, cuando la historia del cuento infantil, ya desde Andersen, Grimm o Perrault, está repleto no sólo de crueldad sino de cosas peores como canibalismo, incestos, motivos sexuales o notas escatológicas y gore, mucho gore. Y eso que los cuentos más famosos no son originales, sino recogidos de la tradición popular y suavizados por ellos para los niños :-O
Pienso que los niños de ahora se asustan de poca cosa, y si nosotros pudimos con aquellos cuentos, tampoco hay que sobreprotegerlos tanto con estos de ahora.
(uyyy… me ha salido un no-comment, sorry :-)))
De Disney dejé de interesarme hace ya varias películas; me quedo con sus clásicos, y es que Pixar lo cubre casi todo. Ahora, menuda descripción en tu artículo: ¡como para llevar a la sobrina a verla! Va a ser que no, eh. De todas formas, me ha picado la curiosidad, por mala que sea, de ver hasta dónde ha llegado Disney en esta ocasión. Veremos si la encuentro para echarle un vistazo. ¡Un abrazo! ^_^
Bueno, al margen de la calidad del producto (que a mí no me ha parecido malo, aunque sí con carencias), hemos de reconocer que si nosotros sobrevivimos a todos esos crueles momentos de los clásicos los niños y niñas de hoy no tienen por qué ser diferentes. De hecho pienso todo lo contrario que el comentarista de más arriba, no sólo los niños de ahora no se asustan con más facilidad, sino que son mucho más despiertos que nosotros a su edad. Obviamente luego habrán que mirar cada cual por sus hijos, su personalidad particular y lo que crean que pueden soportar o no.
Personalmente no soy padre claro, pero es un par de ocasiones he estado a punto, siendo la más dolorosa la pérdida de la niña a los 5 meses de gestación, pero reconozco que te asaltan preocupaciones futuras que antes ni te planteabas sobre esa pequeña parte de tí que va a tener que afrontar el mundo con tu ayuda. Así que bueno, quiero decir que también entiendo lo que dices, aunque no sea la misma situación. No hay duda de que es complicado.
Por cierto, no sé si ya la conoces, pero he encontrado indirectamente por mención de otro blog esta página de carteles estilo perplagio:
http://fx.worth1000.com/contests/24687/mate-a-movie-15
Nana: La crueldad es brutal; pero además, en "Tiana", hay una propensión ocultista bastante peligrosa. Es curioso (revelador) que los directores de este film sean los mismos de "La sirenita" que tú mencionas !)
Serreina: No creo que sea tanto problema de la clasificación en sí como de los que la administran. Seguro que quien lo hizo esta vez no tiene críos de 4 años (o ha sacado un beneficio extra por su decision !)
Ratona: Tienes razón y tienes razón, pero...
no me quejo de que la película sea como es, sino que -como bien explicas tú- nos vendan una historia completamente distinta. Me ha costado encontrar fotogramas de la película con esos fragmentos siniestros de los que hablo en el artículo; en cambio del caimán trompetista, la princesita, las ranitas cantando y demás hay para empapelar la habitación. Lo denunciable aquí es que no nos dicen nada sobre la brujería, el vudú, los demonios y demás elementos argumentales sobre los que se sustenta la película. ¿Quizá porque, de saberlo, muchos padres no comprarían entradas? Ya no se trata de sobreproteger a nuestros hijos; me quejo de que nos han engañado.
Eso es algo muy próximo a la publicidad engañosa (penada)... lo que me lleva a otra reflexión: Si el film ha sido concebido así, pero se vende de la otra manera, ¿se concluye que lo han hecho expresamente?... Esto es, si cabe, más grave.
Julio: Ya que lo citas, ¿sabes lo más sorprendente de esto, lo que de verdad me ha dejado PERPLEJO? Que el productor ejecutivo de "Tiana" es... John Lasseter, el alma mater de Pixar!
Esto, unido a la decepcionante "Up" (sí, ya sé que tendré que escribir un artículo argumentando este sacrilegio que me atrevo a proferir!), pues me ha llevado a preguntarme qué le pasa a este hombre desde que Pixar fue absorbida por Disney y le pusieron al frente del asunto...
Trepamuros: Antes que nada lamento mucho la pérdida de tu hija; debió ser realmente duro.
En cuanto a la legítima preocupación por nuestros hijos hay poco que debatir; pero quiero ser yo quien decide qué programas ven, o películas, u obras de teatro, o dvds o videojuegos; o que libros leen... Particularmente el esoterismo no entra en mis valores a transmitir, y de la misma manera que no le regalaría a mi hija un libro de Quiromancia en vez de un cuento de Pocoyó, tampoco quiero "regalarle" una matinal en el cine viendo "Tiana y el sapo" creyendo que iban a ver un cuento infantil. No sé si me explico.
Por cierto conocía Worth, pero no estos carteles que me has linkado. Son unos cracks del Photoshop; siento una envidia !!!!
Hola!!!!
Pido perdón por faltar tanto tiempo, es que la cosecha de trigo y unos días de decanso....
no sabía de esto, gracias por comparrtir.
Buen fin de semana y un abrazo de oso.
(!): ¿No te gustó Up? ¿Porque te parece melodramática? Sabes que ese principio -sacrilegio- me recuerda a las películas de John Ford -sacrilegio x 1000- donde con dos o tres planos cuenta una historia. Acabo de terminar de ver la de Disney y me gustó más de lo que esperaba, y sí que tiene un punto macabro para el público infantil. Espero con ansia la crítica de Up, estaremos pendientes, a mí me encantó. ¡Un abrazo!
Estoy de acuerdo contigo perplejo, sentí que me daban gato por liebre, habían algunas escenas que a mi entender son un tanto macabras para niños de 4-5 años. Es cierto que ahora son más espabilados pero los mios son responsabilidad mia y me gusta filtrar lo que ven.
Un abrazo
A mí me pareció Tiana, más de lo mismo, el diseño de Tiana es claramente Bella, incluso la a doblado la misma. El doblaje del malo es infame, la voz de Gurruchaga, no le pega ni con cola. Los números musicales idénticos a Hércules, en fin veremos qué pasa con Rapunzzel, en cuanto a Up, a mi me encanto.
Común: Rebienvenida (que no es lo mismo que bienrevenida) jeje !)
Julio: No me gustaron algunas cosas de "Up" que espero explicar pronto (aunque me está costando resumirlo) Mi queja sobre "Tiana" no es tanto de la película sino de la (incorrecta) calificación por edades unido a que en la promocion del film se obvia (¿intencionadamente?) esa vena macabra y espiritista que sustenta el argumento.
Patty: Llámame "antiguo", pero a mí también !)
Carlos: Hablando de "autoplagios" corre por youtube un video curiosísimo donde se demuestra que "Robin Hood" calca movimientos, personajes y secuencias enteras de "El libro de la selva" !)
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